Editorial: Decreto sobre uso de plaguicidas
Como muchos de ustedes saben se encuentra en proceso la iniciativa con Proyecto de Decreto por el que se reforman diversas disposiciones de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, relativo a la sustitución de plaguicidas en defensa del medio ambiente.
En CAADES creemos que la iniciativa de eliminar el uso de diversos plaguicidas, traería graves repercusiones para el sector productor mexicano y sinaloense.
México es de los principales productores y exportadores de alimentos del mundo. Siendo de las pocas industrias con un crecimiento sostenido importante en la última década. Más de $16,000 millones de dólares son exportados cada año de frutas y verduras.
Sinaloa es al mismo tiempo un importante productor y exportador de hortalizas, así como el principal productor de granos de México. El volumen total de producción de verduras y granos del estado es de alrededor de 12 millones de toneladas que son cosechadas en 800,000 hectáreas de riego y 300,000 de temporal. El valor de la producción Sinaloense asciende aproximadamente a $3,000 millones de dólares cada año, de los cuales $1,000 millones son de hortalizas tales como tomates, pimientos y pepinos.
La iniciativa de reformar y adicionar diversas disposiciones a la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en materia de plaguicidas podría traer graves repercusiones para el sector productor mexicano y sinaloense. Ya que con las nuevas definiciones de Plaguicidas Altamente Peligrosos y el criterio con el principio de precaución, sin considerar la evaluación de riesgos, se podrían eliminar una gran cantidad de moléculas importantes para la protección de los cultivos de la región, lo que nos pondría en una situación de vulnerabilidad ante nuestros competidores.
Bajo este escenario de cambio, las casas comercializadoras y formuladoras de estos agroquímicos tendrían que invertir en el desarrollo de nuevos productos que sustituyan los actuales. Incrementando los costos de los mismos, y lo que es más importante, los procesos de aprobación de las autoridades, tanto en México como en los países destino, podría tardar más de 4 años. Incluso, habría la posibilidad de la aparición de un mercado negro y piratería de insumos.
De acuerdo a la propuesta establecida por PROCCYT (Asociación Protección de Cultivos, Ciencia y Tecnología), “Los plaguicidas altamente peligrosos estarán sujetos a la implantación de medidas de reducción de riesgos tras una evaluación de riesgos que realice la autoridad competente. Se prohíbe la utilización de los plaguicidas o aquellas sustancias o compuestos que no cuenten con el registro vigente debidamente expedido por la autoridad competente conforme a la legislación de la materia, y los que estén prohibidos en tratados internacionales de los que el estado mexicano sea parte”.
CAADES coincide con dicha propuesta, ya que actualmente la evaluación de riesgos es una de las herramientas que adoptan los esquemas de certificaciones más reconocidos en inocuidad, nacionales e internacionales.
Las empresas productoras y exportadoras miembros de CAADES que cuentan con certificados de inocuidad comercial se benefician de estas herramientas para establecer sus medidas preventivas y/o control (procedimientos para la realización de sus diferentes actividades, diseño de áreas e instalaciones, uso de equipos y herramientas, capacitación, planeación, mejora continua, entre otros).
Otra parte importante de la evaluación de riesgos, por disposición oficial, es que todos los productores/empresas agrícolas deben adquirir y usar solamente plaguicidas que estén registrados y aprobados para dicho uso tanto en el país de producción (México) como en el país de destino (USA, Canadá, Japón, entre otros) según lo exige la normativa vigente. Por ejemplo en México la COFEPRIS (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios) es quien emite el Registro Sanitario Coordinado (RSCO) y en Estados Unidos es la EPA (Environmental Protection Agency). Deben utilizarse de acuerdo con las instrucciones de la etiqueta, incluidos los rangos de aplicación, normas de protección del trabajador, equipos de protección personal, almacenamiento y eliminación de contenedores. (Ver NOM-003-STPS-1999)
Así consideramos que el decreto a la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en materia de plaguicidas debe considerar a profundidad los aspectos anteriormente mencionados y amparados por la normatividad actual para que al igual que como se cuida la inocuidad y el medio ambiente, también se cuide no afectar la producción y exportación de alimentos Mexicanos.
Georgius Gotsis
Veggies From Mexico, CEO